El regreso inesperado de un icono
En los últimos meses, el mundo de la moda ha sido testigo de un resurgimiento sorprendente: el sombrero pillbox. Este accesorio, tradicionalmente asociado a la elegancia clásica del siglo XX, vuelve a ganar protagonismo en editoriales, pasarelas y estilismos urbanos durante la temporada otoño-invierno 2025. En efecto, la pieza que popularizaron figuras como Jackie Kennedy o Lady Di reaparece gracias a la creciente nostalgia estética que caracteriza a las tendencias actuales. Asimismo, diseñadores de renombre lo han incorporado en sus nuevas colecciones, reivindicando su silueta estructurada y su capacidad de aportar sofisticación de manera inmediata.
Las pasarelas señalan la tendencia
Por un lado, la presencia del pillbox en las pasarelas confirma que su regreso no es fruto del azar. Durante las semanas de la moda europeas, varias firmas lo presentaron como accesorio protagonista, especialmente en looks minimalistas y de sastrería. Además, en eventos como Oslo Runway 2025 o la Semana de la Moda de París, este sombrero apareció en versiones reinventadas: materiales técnicos, colores vibrantes y acabados inesperados como charol o piel metalizada.
En conjunto, estas propuestas transmiten un mensaje claro: vuelve un interés por la sofisticación clásica, pero reinterpretada desde una óptica contemporánea y versátil.
Celebridades que impulsan su popularidad
Por otra parte, la popularidad del pillbox ha recibido un fuerte impulso gracias a celebridades que han decidido incorporarlo a sus estilismos diarios. Jennifer Lawrence, Lily Collins y Zoë Kravitz, por ejemplo, han sido fotografiadas luciendo este accesorio en looks urbanos, combinándolo con prendas monocromáticas, abrigos de líneas rectas y maquillaje muy natural.
Como resultado, el sombrero se ha consolidado como símbolo de elegancia accesible. De hecho, su aparición constante en redes sociales y revistas de estilo ha aumentado significativamente el interés del público, especialmente entre quienes buscan piezas que aporten un toque retro sin recurrir a lo extravagante.
Materiales, colores y nuevas interpretaciones
En cuanto a las versiones disponibles en 2025, el pillbox se reinventa por completo. Si bien los modelos tradicionales en fieltro o terciopelo siguen presentes, ahora conviven con alternativas más modernas en tejidos reciclados, tweed o rafia rígida. Del mismo modo, los tonos neutros continúan siendo los favoritos —negro, crudo, gris y camel—; sin embargo, la industria también apuesta por propuestas más atrevidas, desde estampados de leopardo hasta acabados metalizados.
En consecuencia, las marcas emergentes han encontrado en este accesorio una oportunidad para explorar la artesanía y la creatividad, incorporando bordados, estructuras geométricas y aplicaciones decorativas.
Cómo lo llevan las expertas en estilo
A nivel práctico, el éxito del pillbox no solo se debe a su estética, sino también a su versatilidad. Por ejemplo, en 2025 se combina con abrigos oversize para crear un contraste elegante y equilibrado. Asimismo, aparece junto a trajes de sastrería que refuerzan un look profesional, o con vestidos minimalistas que le permiten ser el centro de atención.
Las estilistas recomiendan llevarlo ligeramente inclinado y evitar accesorios recargados, ya que el sombrero tiene suficiente protagonismo por sí mismo.
Una tendencia que combina tradición y modernidad
En definitiva, el regreso del sombrero pillbox refleja cómo la moda actual recupera elementos del pasado para reinterpretarlos desde la modernidad. Por ello, su presencia en pasarelas, celebridades y el street style europeo demuestra que este accesorio tiene un lugar destacado en el panorama contemporáneo. Todo indica que, lejos de ser una moda pasajera, el pillbox se consolidará como un complemento clave en las próximas temporadas.
