El incremento de la actividad de las fábricas españolas siguió ganando impulso durante el mes de octubre, según el índice PMI manufacturero, que subió a 52,1 puntos desde los 51,5 del mes anterior, según S&P Global y Hamburg Commercial Bank.

La mejora del PMI manufacturero en octubre reflejó los aumentos simultáneos tanto de la producción como de los nuevos pedidos. No obstante, el incremento de la demanda se debió principalmente a la demanda interna, ya que los nuevos pedidos de exportación disminuyeron al ritmo más rápido en cinco meses, destacando la debilidad de los pedidos desde Francia.

«Bajo la superficie de este alentador crecimiento, surgen algunas señales de tensión», ha advertido Jonas Feldhusen, economista junior de Hamburg Commercial Bank, quien apuntó que la inestabilidad política en Francia «parece estar lastrando cada vez más la actividad económica, con repercusiones para los exportadores españoles», así como la presión adicional relacionada con las medidas proteccionistas de Estados Unidos.

Asimismo, el experto ha avisado también de que las señales del mercado laboral también se están volviendo cautelosas, ya que las empresas han reducido sus contrataciones por segundo mes consecutivo, aunque esta reticencia a ampliar las plantillas «parece ser menos estructural y más táctica».